Anyone else but you

diumenge, 20 d’abril del 2008

De todo y de nada. Sin pretensiones. Casa de la yaya se convierte en el cálido cobijo que todos nosotros hemos disfrutado alguna vez. Esta vez sin nuestros platos favoritos preparados por arte de magia encima de la mesa, sin el calor del invierno abrigándonos, sin los programas rosas sonando a todo volumen por el pequeño living room; tampoco las incontables llamadas de personas sin nombre preguntando por ella, sin las tiradas de cartas adivinando todo lo que pasa y lo que no, lo que el destino nos prepara y lo que nosotros le preparamos a éste; sin sándalos perfumando cada hueco de historias...

Casa de la yaya, de nadie y de todos. 

No hay tiempo, dicen. Llegamos perseguidos por el minutero de nuestro reloj, comemos ensaladas ya sin olivas, nos abrigamos con mantas pero con nuestros dedos helados asomándose por la estrechez de éstas, escuchando noticias importantes para nutrirnos de cultura, por supuesto, a un volumen bajo para no alterar aún más el acelerado ritmo que llevamos durante todo el día; con el destino establecido, sin sobresaltos, sin imprevistos, todo escrito, tal y como debe suceder; desprendiendo con cada paso un olor a igualdad, a similitud entre el resto de pasos que avanzan sin detenerse, como aquellos muñecos de cuerda viendo que ésta está apunto de finalizar junto a su paso...

Ya nada será como antes, definitivamente, echo de menos ser una niña y estar en casa de la Yaya; es por ello que he nombrado así mi blog, por esos increíbles momentos vividos allí.

Y de mientras, unos cuantos años después, la Yaya sigue e insiste con cada palabra del primer párrafo aquí descrito. Calidad de vida señores.




1 comentaris:

fulletortuga ha dit...

Es nota que se't dona be escriure...gran escrit per començar el blog i es que aquesta frase “Ya nada será como antes, definitivamente, echo de menos ser una niña y estar en casa de la Yaya” la comparteixo al 100%. Encara que no sigui a casa de la yaya, a vegades es troba a faltar els moments de quan érem nens. Jo per això quan veig Bola de Drac, em sento aquell nen que era i em porta molts records positius.

Un besitoo i animus per el nou blog!